sábado, 8 de agosto de 2015

Oportunidades

Una vez escuche a uno de mis mentores decir, palabras más, palabras menos "en esta vida puedes elegir muy pocas cosas y una de ellas es a tu pareja". Estarás leyendo esto?


Y de esas cosas que podemos elegir en la vida es a lo que nos vamos a dedicar para vivir, decente o indecentemente y con quien vamos a hacerlo.


Considero que el trabajo que hagamos debe apasionarnos, llenarnos y retarnos a crecer en todo momento por lo que debemos buscar esos objetivos y evitar caer en la zona de confort tan peligrosa.


Por otro lado, las oportunidades son pocas y hay que saber aprovecharlas por lo que hay que aprender a distinguirlas y por qué no, también tomar el riesgo. Siempre existe quien critica o demerita pero el éxito tiene muchas caras y caminos y si quien habla mal de los demás ya tienen lo que desean que permitan a los demás intentarlo.


Así que tomen su oportunidad y háganla crecer cómo y con quién deseen.


Como siempre, este es un espacio abierto a comentarios constructivos y destructivos.


Hasta la próxima entrada.

domingo, 24 de mayo de 2015

Zona de confort.

¿Cuál es el punto en el que perdemos el foco de lo que deseamos y no nos hace seguir adelante con pasión y entrega para solo dejarnos llevar por la marea?

Es una pregunta compleja. La mayoría de las ocasiones no tenemos la respuesta con certeza ya que el ritmo de vida nos obliga a modificar hábitos y pensamiento.

Ahora la siguiente pregunta ¿Qué hacemos cuando nos damos cuenta que hemos caído esa rutina? Me parece que es aún más peligrosa esa situación que la primera si no hacemos nada al respecto.

El caer en la zona de confort no solo nos quita oportunidades, también nos va quitando las ganas de crecer personal y profesionalmente o en términos más banales convertirnos en el Godínez que siempre odiamos.

¿Qué puedo hacer si pienso que estoy en zona de confort y quiero salir corriendo? Analiza bien lo que haces y lo que estás dispuesto a hacer por ello. Así como las posibilidades para cambiar tu entorno. Si eres emprendedor, planea nuevas estrategias de negocio, ideas novedosas para realizar ventas o productos. Si eres empleado, habla con tu jefe sobre tus inquietudes y nuevas ideas, tal vez solo necesites un enfoque distinto y un poco de apoyo para explotar lo que tienes en la cabeza.

Un buen amigo me dijo una vez, si la vida que estás llevando no es vida entonces acaba con ella, lo cual podría aplicar en esto, una vez más si ustedes así lo desean.


Hasta la próxima entrada.

miércoles, 13 de mayo de 2015

Entre más corriente ¿Más ambiente?

¿Qué tan dispuestos están a aguantar un mal ambiente laboral (no importa la razón)?
Esto tiene que ver un tanto, o mejor dicho, un mucho con salir de la zona de confort, pero ese es tema de otra entrada.

Volviendo al tema, el ambiente que en el que nos desempeñamos determina el grado de éxito con el que llevamos a cabo nuestras actividades, no importa si es una búsqueda de información en Internet o el desarrollo de componentes para un proyecto de millones de dólares, si no estamos a gusto, simplemente tendremos una loza que no nos permitirá dar lo mejor de nosotros.

Ahora bien, el jefe ideal, que te da permisos, es abierto a escuchar y tiene los puertos de redes sociales sin restricciones, entre muchas otras razones. Qué pasa cuando comienzan las políticas "restrictivas" o diferentes como registrar entrada y salida (he de resaltar que para el caso de TI esto es muy subjetivo); firma de "convenios" que antes de palabra eran suficientes; o bien, omisiones en la comunicación directa y la generación del llamado y perjudicial radio pasillo.

Sin duda es un cambio radical a lo acostumbrado, con lo que comienzan las especulaciones y las dudas ¿Ahora por qué lo hace? ¿Seguro hay problemas de dinero? ¿Van a correr a alguien?

Podemos hacer varias cosas, sin tener todas las respuestas pero podemos preguntar, dando una bofetada con guante blanco al silencio que nos encontramos. También podemos seguir haciendo nuestro trabajo, dejando que este hable por nosotros, finalmente el que nada debe, nada teme. Cualquier cosa que hagamos es en favor de un ambiente sano.

Si a una organización le va bien entonces le va bien a los miembros de esa organización, pero que pasa si a los miembros les sucede lo contrario, ¿Le sigue yendo bien a la organización? Recordemos que el pez se pudre por la cabeza.


Hasta la próxima entrada.